Desde la década de los ochenta el grafiti surge en la Ciudad de México proveniente de Estados Unidos tras su paso por Tijuana y Guadalajara como una de las manifestaciones más constantes aunque poco exploradas de la cultura. Esta práctica es llevada a cabo por una extensa comunidad, en principio underground, que pronto se convierte en un fenómeno urbano de enormes dimensiones.

En esta publicación, el autor analiza los orígenes del grafiti así como las complejas relaciones socioculturales que lo envuelven. La investigación, realizada mediante una minuciosa labor de campo, muestra el trabajo elaborado por grafiteros y sus crews en algo más de treinta años, traza una línea desde los orígenes del grafiti hasta nuestros días y entrevista a 21 protagonistas para acercar al lector al mundo del grafiti. Se incluye un glosario de términos utilizado por los grafiteros.

Profusamente ilustrado con una amplia selección de grafiti (estilos, firmas, mensajes y piezas), esta publicación ha contado con el apoyo de HUMO, uno de sus máximos exponentes, como asesor.